22 de abril de 2009

ESPECIAL FAMOSOS DE CANTA CONMIGO ARGENTINA CONTRA LOS EXITOSOS PELLS



El Trece pondrá al aire el viernes a las 23 hs. un especial de Canta Conmigo Argentina con famosos que debera competir con la segunda parte del capítulo de Los exitosos Pells. Algunos de los famosos que participaron son Matías Alé, Jorge Ibañez, Mariana Arias y Panam.

21 de abril de 2009

DE BELLIS Y POLITTI, LA PAREJA ELEGIDA PARA "BONJÚ TAILANDIA"

“Bonjú Tailandia”, así se llama la pieza teatral para la cual el productor Gregorio Berenguer convocó a lo que se supone su dupla ideal: Marcelo De Bellis y Andrea Politti. Esta comedia sería parte de la cartelera a mediados de año pero aún no se define la sala.



Hasta el momento sólo la conductora de “Canta conmigo” (el Trece) habría firmado contrato. De Bellis habría pedido un tiempo para madurar la idea. “Estoy pensando, porque había programado mi 2009 para no hacer nada”, confesó el actor de “La cena de los tontos” a PUROSHOW. “Es la propuesta que más me interesa, pero tengo ganas de descansar un largo rato luego de la temporada marplatense. En estos momentos me preparo para emprender mis vacaciones familiares en Villa La Angostura. También me llamaron de ShowMatch para hacer una participación y aún no contesté. Tal vez sea algo esporádico que no me insuma todo el año”, remató.

10 de abril de 2009

ANDREA POLITTI: “SUEÑO CON SER COMO MÓNICA BELLUCCI”

Simpática, versátil, curvilínea, distinta, luego de haber estado al frente de Cuestión de peso duplica el rating de la tarde del 13 animando Canta conmigo Argentina. Actriz con un cuarto de siglo de trayectoria y seis de popularidad, gracias justamente a la conducción, habló con GENTE de su adolescencia con un padre que murió en el exilio, de cómo encaró a su futuro marido y de su cuerpo, al que acepta sin chistar.

















Su entusiasmo, su risa, aparece y no deja espacio a otra cosa. Ella lo sabe. Por eso, encuentra motivos para reír en todo momento. Saluda y ríe. Para disimular nervios, ríe. Para eludir sonrojarse ante confesiones íntimas, ríe. Para cambiar el tono del relato y no caer en un melodrama, ríe, ríe y vuelve a reír. Así es Andrea Politti (45), alguien que tiene el don del decir con alegría y entereza aunque la historia de su relato no sea precisamente feliz. “A mi las cosas me costaron mucho”, empieza, antes de detallar los pasos que superó hasta “convertirme en una mujer tranquila y alegre. Me siento orgullosa de lo que logré con mi carrera (con Canta conmigo Argentina duplicó el promedio de rating de la tarde del 13), y feliz con mi familia (lleva once años de pareja con Fernando Hagelstrom y tiene un hijo, Galo, de ocho años). Nunca imaginé la vida que tengo ahora”, confiesa, y da lugar a seguir preguntando.

- ¿Cómo lo habías imaginado de chica?
- Toda la vida quise actuar, cosa que me sigue movilizando. Pero a los 12 años me había propuesto no casarme. Bueno... De hecho, con Fer no me casé, cosa que podría ocurrir en algún momento...

- ¿Qué ayudó a cambiar tu visión de adolescente?
- El paso del tiempo me enseñó que al amor no hay que buscarlo: aparece. Hay un destino en cuanto a la persona que uno conoce. A veces para mal, como para aprender algunas cosas –mi primer casamiento duró sólo seis meses-, y otras para bien.

- A propósito: ¿es verdad que conquistaste a Fernando en un bar?
- Sí. El era barman. Fui con una amiga recién separada, que me insistió para que saliéramos, porque yo venía de un tiempo de fobia a los hombres. Primero hubo un comentario sobre su pelo largo. Luego nos enteramos por la mesera de que era músico... Así que al rato me vi con mi tasita de cortado yendo directo a la barra.

- ¿Lo encaraste vos?
- ¡Y sí! Fue raro el encuentro. El, como buen músico, bien colgado, no conocía mi faceta de actriz. ¡Mis quince años de carrera el tipo ni los vio...! Si bien le llamaba la atención que todo el mundo me mirara, no entendía por qué. Me sentí muy cómoda con él. La primera salida conversamos seis horas; hubo un gran entendimiento. En ese tiempo él planeaba irse a vivir a España, así que eso relajó mis fobias.

- Léase que inicialmente lo pensaste como aventura...
- ¡Para nada! No hubo encuentro íntimo hasta que volvió.

- ¿Y te arrepentiste al minuto de que subiera al avión?
- Sí, estaba como loca. Me llamaba por teléfono día por medio. Me había empezado a abrir el corazón, aunque yo no quería. El se iba para toda la vida, pero volvió. Allá tenía trabajo y más oportunidades. Sin embargo, se jugó por lo nuestro, y eso terminó de conquistarme. Encaramos una relación, aunque siempre existía el fantasma de que se pudiera ir, algo nada agradable para mí, porque me recordaba el exilio de mi papá.

- Otro hombre que se te iba, y al mismo país...
- Es que tras haber perdido a mi papá, a sus 47 años (Luis Politti, también actor, murió por una hepatitis en España en 1980), no volví más allí.

- ¿Qué recordás de aquella visita al viejo?
- Fue hermoso, viajé en el ’78. Ese encuentro me marcó. Por suerte, fue en el momento de pasar de niña a mujer. Tenía 14 años. Me enseñó a depilarme, a ponerme ropa sexy, a ser sensual, y me impulsó a estudiar y a ser coherente con mis sentimientos.

- ¿Fue la última vez que lo viste?
- No. El último recuerdo que tengo de él es muy triste, y lamento, realmente, haber vivido esa situación. Fue a principios de 1980. El se escapó y vino a vernos para Navidad. Estábamos en la esquina de Gurruchaga y Corrientes. De pronto apareció un Falcon verde y mi papá salió corriendo. Se subió a un taxi y arrancó. Los del Falcon me preguntaron: “Nena, ¿quién es ese hombre?”. “Mi papá”, les respondí, y también salí corriendo. Esa fue la última vez que lo vi. No hay derecho... Cuando murió, la familia se destruyó, y nunca pudo reconstruirse. Aparte, empezamos a tener problemas económicos y compañía...

- ¿Cómo hiciste para superar esa historia?
- Por fortuna, empecé a hacer terapia, y logré poner aquello en un lugar que no moleste, porque dolor siempre va a causarme. Pude seguir adelante, y me fortalecí con el recuerdo de mi papá, con haberlo visto luchando en el exilio, y lucirse nuevamente como actor. El se había aferrado a lo creativo y decía: “Me moviliza volver a conquistar al público”. Un tipo conectado con la vida, a pesar de todo. Eso a mí me quedó marcado como un sol en el camino, un sol al que siempre sigo.

- Antes dijiste que las cosas te habían costado mucho. ¿Te referías al costado personal o también al profesional?
- A los dos. Antes de convertirme en actriz tuve miles de trabajos: animé fiestas de cumpleaños en Pumper Nic, vendí ropa, fui empleada administrativa y hasta secretaria de un diputado del Partido Intransigente. De allí que me resultó familiar recurrir al Congreso por la Ley de Obesidad (Nota: Desde el programa Cuestión de peso impulsó una ley, aún sin número, aprobada el año pasado en la Cámara de Senadores; ley que falta reglamentar, que establece que la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la obesidad, la bulimia y la anorexia deben ser cubiertos por los planes médicos de las obras sociales y las firmas de medicina prepaga). Considero que si uno se toma en serio las cosas e insiste, todo se puede conseguir: no hay que perder esa esperanza.

- ¿Cómo hacer para lograr rating, divertir y brindar un servicio a la vez? Suena a imposible...
- Yo no soy la Madre Teresa de Calcuta ni mucho menos, pero siento que si puedo hacer algo por el otro, debo hacerlo desde el corazón, aunque no sea públicamente. Me gusta trabajar y comprometerme. Cuando me propusieron Canta Conmigo Argentina, me encantó apuntar a la diversión en un momento como éste, cuando hay crisis de valores y el mundo se pelea. La alegría y el entretenimiento no son un género menor: resulta difícil lograrlos.

- Vuelvo a tu vida puertas y espejos adentro. ¿Cómo te llevas con tu cuerpo?
- Sé que no tengo la figura de una modelo, pero hay que aprender a aceptar lo que a uno le tocó. No me haría cirugías en la cara, para no perder expresión. Me gusto así. Sueño con ser como Monica Bellucci, mi referente femenino.

- A propósito de cuestiones femeninas, ¿un hijo es suficiente para tu vida o...?
- Me hubiese gustado otro, pero no ha llegado. Y no haría nada fuera de lo natural para tenerlo. Estoy probando... Si llega, será muy bien recibido.

- En la intimidad, tras once años de pareja, ¿cómo se mantiene la fogosidad?
- Después de la maternidad, mi libido anduvo repartida por otros lados. Sin embargo, fue importante no perder encuentros de pareja. Mi recomendación para mantener viva a la pareja es conservar la fantasía. Si no, todo se convierte en una cosa casi de hermanos.

- ¿Detalles, Politti?
- No salimos a hoteles: preferimos usar los distintos ambientes de la casa. También buscamos momentos de intimidad cuando no está Galo. Y algo fundamental...

- ...que es...
- Nada como el amor como condimento fundamental para mantener intacta la sensualidad.