21 de septiembre de 2008

ARCHIVOS DE ENTREVISTAS

"MI COMPROMISO CON LA OBESIDAD ES ABSOLUTO"

Confiesa que antes de ser madre sólo encontraba placer en el trabajo. Hoy amplió su horizonte, y admite haber edificado un mundo privado más equilibrado


Este año, decidió continuar en el programa debido al compromiso que asumió para que se apruebe la ley de Obesidad. Se siente orgullosa de haber llegado hasta el Congreso.

Descubrió que la conducción la seduce y asegura que, desde hace un año y medio disfruta como nunca de su labor en el programa de Canal 13, “Cuestión de Peso”. Es más, hasta se sorprende de la continuidad del ciclo en tiempos tan vertiginosos como los que atraviesa la televisión actual. Este año Andrea Politti reeligió continuar en el programa debido al compromiso que asumió para lograr que se apruebe la ley de Obesidad, y cuenta que llegó hasta el Congreso y se sintió muy responsable de lo que estaba haciendo. “Deseo que se reconozca que la obesidad es una enfermedad, que se la trate como tal, inclusive, que desaparezca la discriminación y que aquellas personas que lo necesitan puedan atenderse en lugares públicos.”

— ¿Considera que el ciclo cumple una función social?

—Sí, con el tiempo nos fuimos instalando y ya hemos alcanzando pequeñas conquistas, aunque vamos por lo grande que es lograr que se sancione la ley.

—¿Usted también adquirió el hábito del buen comer estando diariamente junto a un profesional como Alberto Cormillot?

—No es tan así. Soy una persona con tendencia a engordar, pero nunca me preocupó. Al contrario, traté de practicar ejercicios para mantenerme en forma, aunque no con la finalidad de estar delgada.

—¿Considera que el medio artístico exige a las actrices cuerpos estilizados, sobre todo, para hacer ficción en televisión?

—Sí. Y en cierto modo, esa es una presión. Pero entiendo que si un físico tiene una predisposición determinada es imposible cambiarla. Por otro lado, la gente se identifica con los modelos reales. Es muy lindo disfrutar visualmente el cuerpo de una modelo, pero la mayoría de las personas no son así. Yo jamás voy a medir 1,74 m, ni voy a mantener una juventud eterna.

—El público tiene memoria a la hora de recordar personajes de ficción. ¿A usted la identifican con alguno?

—Sí, la gente me habla del papel que hice en “Resistiré”. Pero lo que más me sorprende es que me hablen de “Confesiones de mujeres de 30”, porque era una obra de teatro.

—¿Siente necesidad de retomar la actuación?

—Tengo proyectos y una posibilidad de hacer teatro. Lo estoy pensando para el año que viene, porque el combo televisión-teatro, un hijo y un marido no me cierra. Es más, creo que en un determinado momento de la vida hay que equilibrar bien las situaciones.

—¿Equilibrar, sobre todo, para compartir tiempo con Galo, su hijo?

—Mi hijo tiene 6 años, está en primer grado. Empezó la primaria, y me interesa mucho estar a su lado y ayudarlo en las tareas. La primaria es un paso muy difícil para los chicos, ya que dejan el mundo irreal para enfrentar el real.

—Entonces, ¿este es su último año en el papel de conductora?

—Como dije antes, debo tomar una decisión porque quiero volver a actuar. Estoy leyendo algunas obras y, seguramente, algo va a salir de esto, porque lo que me falta es organizar mis tiempos.

—¿La maternidad desplazó el ego que su carrera de actriz supo alimentar?

—Sí, porque en una época de mi vida sentía placer sólo por trabajar. Ahora, en cambio, logré ampliar mi horizonte y todo se encuentra mucho más equilibrado. Me gusta estar con mi familia y cenar con ellos.

—A pesar de ser pequeño, ¿su hijo ya se interesa por el mundo televisivo?

—Me acompaña al programa los días feriados. En verdad, lo tengo que frenar porque esos días quiero que descanse y juegue, pero ya me dijo que él quiere actuar. El 25 de Mayo hasta vino al piso vestido de época. Además, a mi hijo le encanta la música.

—¿Heredó la vocación de su madre y su marido?

—Tal cual. Mi mamá era pianista y mi marido, Fernando Hagelstrom, es músico saxofonista. Mi padre, artista. Y sus abuelos paternos, también músicos.

—¿Le habla acerca de la exitosa carrera de su abuelo materno, el actor Luis Politti?

—La verdad es que mi hijo todavía no entiende muy bien dónde está su abuelo. Mamá falleció el 9 de diciembre, de modo que tiene mucha ausencia de abuelos. Me resulta muy difícil explicarle por qué no están. Pero sé que muy pronto él y yo vamos a compartir fotos y videos de sus películas.